No recuerdo muy bien el momento ni la persona, pero en su día hicimos la apuesta de escribir un soneto, daba igual el tema, pero había que clavar las estrofas (2 cuartetos, 2 tercetos) y las sílabas (11). TaMpoco recuerdo quién ganó, pero sé que no me resultó nada fácil.
SONETO I – EL PRIMERO
Imito a Quevedo, Lope o Calderón
con la intención de escribir un soneto
lisonjera mi alma afronta este reto
empiezo estos versos, arriba el telón.
Labrando el papel como cruel acero
la pluma escribe sin tomar descanso
ni aun la mitad y veo que me canso
contar las silabas no es lo que espero.
Pero no me rindo y sigo rimando
me queda un poquito, a penas un trecho
vislumbro el final que ya está llegando.
La pesadilla va tocando techo
nunca imaginé lo que está costando
por fin termino. Toca sacar pecho.