De momento no puedo mandaros fotos pero si presentaros a Pablo, la fregoneta o como dicen por aquí la campervan.
Viene totalmente equipada, tiene sus 4 ruedas, motor (sospechamos que de muy pocos caballos), un moderno radio-cd (que no funciona), una sección central de almacenaje (en la que hay que tener cuidado porque se hunde), otra sección que con una barra metálica se convierte en mesa… ya en el maletero tenemos la nevera (de camping y sin hielo que mola mas), la cocina con camping gas, el fregadero cuyo desagüe es un agujero en el suelo y una completa cubertería. Como veis poco mas podemos pedir.
Cuando nos la entregaron también nos dieron algunas normas:
– En Australia se conduce por la izquierda (salvo algún ataque suicida que le da a Ruth de vez en cuando esta controlado)
– No conducir por las noches. Esto no lo conseguimos, a eso d las 6 – 6.30 ya es de noche. El problema es que hay que ir muy atenta porque ves a los canguros a los lados de la carretera queriendo pasar y acojona un poco porque no sabes cuando se van a decidir.
– Cuidado con la velocidad. Con Pablo eso tampoco es problema porque su velocidad media es d 80-90 🙂 pero nos sirve para disfrutar del paisaje aunque siempre es el mismo…
– Dejad un mensaje. Por dentro esta llena de mensajes de la gente del estilo «lo que pasa en Pablo se queda en Pablo» y otras cosas que no puedo reproducir aqui porque este blog dejaría de ser para todos los públicos. La mía sera algo así como «Pablo es nuestro pastor nada nos pasara».
Pese a todo mas de 3000 kms, 9 días y tan felices, We love Pablo! (aunque a ver si pillamos ya una cama).
Besos: Rox